Mención merecida para este cortometraje que lleva el título del principio humanitario “Do no Harm“, o no hacer daño, referido a la Acción sin Daño. Las organizaciones y los trabajadores en ayuda humanitaria y cooperación al desarrollo respetan este importante valor para mejorar las condiciones de vida de las personas y para mitigar o reparar situaciones de catástrofe o conflicto. Más allá de la acción social habrá que detallar que tanto el principio humanitario como el cortometraje comparten también nombre con un capítulo de Lost y con una serie.
Do no Harm es un cortometraje de acción de la directora Roseanne Liang cuyas imágenes no parecen relacionarse, en un principio, con su título. Un tanto gore y explícito, el vídeo ubica su trama en el interior de un hospital, en medio de la noche, donde se lleva a cabo una importante operación. Del sorprendente final nada debemos revelar.